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Toché corazón de León.
Sporting y Real Oviedo hacen tablas en el derby. Toché hace justicia con un Oviedo que se lo creyó. Mariño intervino más que Juan Carlos.
Sporting (1): Mariño, Barba, Lora, Canella, Álex Pérez, Moi Gómez, Sergio Álvarez, Carmona, Scépovic (Carlos Castro 78') , Michael Santos (Alex López 86') y Rubén García (Álex Bergantiños 76').
Real Oviedo (1): Juan Carlos, Cotugno, Carlos Hdez (Owusu 83'), Verdés, Christian (Linares 64'), Ramón Folch, Saúl Berjon, Rocha, Yaw Yeboah (Aaron 57'), Mossa y Toché.
Goles: 1-0 Carmona 14', 1-1 Toché 84'.
El derby asturiano ha vuelto, buena tarde de fútbol y Asturiania en Gijón, solo empañada por los incidentes provocados por ciertos personajes indeseables en el fútbol, quiénes ponen una pancarta insultando a un fallecido, quién entre las masas tira una botella y rompe la luna de un autobús, el que sea, es un cobarde que merece que merece ser sancionado, difícil ser cazado.
A la llegada del autobús del Sporting se produjo una carga policial contra ciertos aficionados locales que portaban bengalas y botes de humo, objetos prohibidos en los estadios. Estos fueron los principales incidentes en una tarde en la que el Real Oviedo ha tirado de corazón y de una lección desde el banquillo que nos otorga un botín de un punto, pero la sensación de haber podido hacer algo más de daño.
Anquela sorprende de inicio con la inclusión de Yaw, con Berjon por dentro formando triangulo con Folch y Rocha y Mossa por la otra banda, el Oviedo comenzaba a asustar en 3/4, pero si que le faltaba algo de precisión.
En medio del diluvio que asoló Asturias por momentos, una falta tonta era disparada por Carmona era rechazada por Juan Carlos cómo pudo, le boto antes, iba con fuerza y balón mojado, el balear lo saco a la derecha, Rubén García cogió el rechazo y puso centro al primer palo donde volvió a aparecer el Andaluz por sorpresa para anotar el primer gol.
La efervescencia azul se vio cercenada de golpe, con un Sporting que dominó el "otro fútbol", al suelo ante el más mínimo roce y sabiendo donde tocaban para ir sacando tarjetas amarillas a Verdés y a Cotugno. Siendo mejor el Sporting, sobre el área de Juan Carlos no sé creaba peligro más que la presión que dan los balones parados y la inconsistencia defensiva azul. Aprovechando el estado del cesped y un resbalón de Christian, Rubén García se aprovechaba y tiraba al palo largo con bote y Juan Carlos rechazaba con mucho peligro.
A partir de ahí el Real Oviedo fue logrando tocar más balón, pero lo cierto es decir que el Sporting lo permitía y a nada que Yeboah o Saúl tocaban el balón, la presión acababa con la jugada azul.
En el 35 de partido llegaba la mejor ocasión azul, Toché encontró a Mariño y el rechaze le cayó a Saúl Berjon que tiró y rechazaba la defensa cuando el balón buscaba el fondo de la portería local.
En la segunda parte la decoración fue cambiando, el equipo volvía a ser el que comenzó el choque, con confianza y valentía en los cambios. El equipo no fue un torrente de ocasiones, pero encerró al Sporting en su campo, Aaron salió en sustitución de Yaw, y luego Linares en sustitución de Christian, buscando la presión que te da arriba el ariete de Fuentes de Ebro.
Carlos Hernández de cabeza estuvo a punto de encontrar premio a la salida de un córner puesto magistralmente por Aaron, resolvió Mariño junto al larguero, y con valentía y ataque constante los de Paco Herrera se vieron más cerca de Mariño que del campo Ovetense.
Owusu salió al campo en sustitución de Carlos, pasando los de Anquela a jugar con 3 atrás, el riesgo y la valentía daban un justo premio en el 84 de partido, Cotugno se adentra dentro del área, falla la defensa local que le da de vuelta el balón al Uruguayo que dispara y rechaza Mariño, el balon le llega a Toché y lo aloja en el fondo de las mallas locales, los 1200 Oviedistas en El Molinon explotaron de júbilo al igual que hicieron los simpatizantes azules en el globo terráqueo, unos 40000 accionistas se encargaron de que ese balón entrase y que en ese brazalete que el de Santomera enseño a Ultra Boys, figuran los valores de Orgullo, valor y garra que nosotros enarbolamos, y hoy el Real Oviedo les hizo honor.
El equipo se sitúa con 5 puntos en la tabla y recibirá al líder de la liga en el Tartiere, el Cádiz, que visitará nuestro feudo el domingo a las 18h.
El mejor: Juan Antonio Anquela. Un premio a la valentía, a un equipo que creyó en si mismo aún cuando el partido expiraba. Los Oviedistas nos sentimos representados en actitudes como esta.
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